Andres Mariani

Andrés Mariani nació en 1970 en Argentina. Vive y trabaja en Barcelona. En su país natal, fue uno de los artistas con Perfil Editorial, produciendo trabajos de campaña para Coca-Cola y Quilmes. La clave de la amplia aceptación de su marca radica en la aplicación de los diferentes formatos artísticos a las necesidades del cliente, ya sea un gran club deportivo, empresa, institución o particular. El arte expresa emoción e inspiración. En su trabajo actual “Ciudades inspiradoras”, Mariani explora la ciudad como inspiración para la vida. El punto donde las causas y las consecuencias se encuentran. Un gran reflejo del trabajo del hombre y el resultado del mismo. La finca se convierte en una encrucijada que conecta personas, marcas y símbolos. Un concepto que define el sentimiento y la expresión de su gente. El artista está inmerso en la conversación directa, clara y sincera con la ciudad de Barcelona. Lo define, lo dibuja, lo revela y lo descompone hasta sus cimientos. La actividad humana esculpe la fisonomía de la ciudad y la vincula a sus marcas y símbolos que la ciudad adopta como propios. Una imagen propuesta que despierta las sensibilidades, valores, sentimientos, inspiraciones y referencias de los sitios seleccionados. Los 4 pilares del trabajo de “Ciudades inspiradoras” son: La Ciudad: Barcelona y sus habitantes; El mediterráneo y su luz. Una visión conceptual de una metrópoli orgullosa de su identidad, con una imagen propia que el artista plasma en forma, color y textura. Marcas: un motor empresarial. Las marcas crean la ciudad y la ciudad crea sus propias marcas. El artista elige los referentes económicos de los habitantes y los expone a través de su mirada. Sentimiento y símbolos: FC Barcelona, un sentimiento que une a la mayoría de los locales y globaliza Barcelona. Un referente deportivo que ha difundido el conocimiento de la ciudad a todos los rincones del planeta. Barça Club es una explosión de fuerza y sentido que el artista captura con la representación de los símbolos del club. Visión: Las formas, las imágenes, los contenidos, la identidad disuelven las referencias para dar cabida a las percepciones personales e intangibles permitiendo que surjan sentimientos, percepciones e interpretaciones mixtas de una realidad estandarizada.