Sergueï Paradjanov

El cineasta y artista, Sergueï Paradjanov, nacido en 1924 en Tbilisi en una familia armenia, es uno de los directores más atrevidos y visionarios surgidos de la ex Unión Soviética. Fellini, Antonioni y Tarkovsky lo aclamaban como un 'genio', 'mago' y sin duda 'un maestro'. Su lenguaje cinematográfico único y explosivo no tiene igual en el mundo del cine.

Después de graduarse de VGIK (Instituto Estatal de Cinematografía) en Moscú, Paradjanov fue enviado al estudio de cine Dovzjenko de Kiev donde, en 1963, creó la película 'Shadows of our Forgotten Ancestors', que le valió un BAFTA y le trajo tanto popularidad mundial como persecucion. Su siguiente película, "Los frescos de Kiev" contra la guerra, fue prohibida. En 1966, fue invitado a Armenia, donde rodó su película más conocida 'El color de la granada' ('Sayat-Nova'), que fue objeto de una fuerte censura soviética antes de su estreno. Sin embargo, esta película ganó reconocimiento internacional, además de provocar aún más a las autoridades.

A pesar de la aclamación internacional, Paradjanov fue un objetivo constante para las autoridades soviéticas. Fue arrestado dos veces por cargos inventados y pasó cinco años en campos de trabajos forzados en Ucrania y Georgia. Durante su encarcelamiento, continuó su actividad creativa: pintar, hacer collages, títeres y sombreros con cualquier material que encontrara. “Me prohibieron hacer películas y comencé a crear collages. Un collage es una película comprimida ", dijo. Después de su lanzamiento, no se le permitió hacer películas durante quince años, por lo que dedicó su vida a hacer collages, dibujos y otras formas de arte. Finalmente, se le permitió trabajar como cineasta nuevamente en 1983, y creó 'The Legend of Suram Fortress' en Georgia.

A pesar de los sufrimientos de Parajanov, no hay evidencia de malicia en su arte. Siguió el principio de responder al mal con bondad: como él mismo lo expresó, "vengarse por el amor". En 1988, el gobierno armenio le construyó una casa-museo en Ereván que, debido al terremoto de 1988, no se completó hasta 1991, un año después de su muerte. Parajanov solía decir: "Tengo tres patrias: nací en Georgia, trabajé en Ucrania y moriré en Armenia".