Pintura Desnudos
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Couple enlacé
Elisabeth Brainos
Pintura - 100 x 50 x 2.5 cm Pintura - 39.4 x 19.7 x 1 inch
2.490 US$
I Believe You to be Her!
King Redd
Pintura - 121.9 x 91.4 x 2.5 cm Pintura - 48 x 36 x 1 inch
5.000 US$
Au coeur du Minotaure
Rachel Daireaux
Pintura - 30 x 60 x 5 cm Pintura - 11.8 x 23.6 x 2 inch
3.395 US$
What’s Kept Inside
Maisha De la Cruz
Pintura - 123 x 214 x 1 cm Pintura - 48.4 x 84.3 x 0.4 inch
9.953 US$
Je l'ai sentie (I felt her)
San Kara
Pintura - 119 x 80 x 2 cm Pintura - 46.9 x 31.5 x 0.8 inch
8.431 US$
Getting somewhere
Kicki Edgren
Pintura - 115.6 x 76.2 x 2.5 cm Pintura - 45.5 x 30 x 1 inch
3.000 US$
The elegant life of Mr H Paris 1967
Key Hiraga
Pintura - 65 x 54 x 0.5 cm Pintura - 25.6 x 21.3 x 0.2 inch
39.607 US$
Caryatid II
Allison Harrell
Pintura - 105.5 x 71.6 x 6.5 cm Pintura - 41.5 x 28.2 x 2.6 inch
8.657 US$
Their landscape, Part 2
Vlada Hauser
Pintura - 120 x 120 x 3 cm Pintura - 47.2 x 47.2 x 1.2 inch
5.884 US$
Collecting Tucumã Fruit
Mara Toledo
Pintura - 50 x 70 x 2 cm Pintura - 19.7 x 27.6 x 0.8 inch
2.037 US$
Blind in the freedom of not having you II
Ritchelly Oliveira
Pintura - 35 x 35 x 3 cm Pintura - 13.8 x 13.8 x 1.2 inch
5.658 US$
Abstrait nu N°26
Aurélie Trabaud
Pintura - 30.5 x 26.7 x 0.1 cm Pintura - 12 x 10.5 x 0 inch
600 US$
Art for your Soul 3
Anastasiia Dushak
Pintura - 60 x 60 x 1.5 cm Pintura - 23.6 x 23.6 x 0.6 inch
1.064 US$
They didn't teach me how to be loved
Ritchelly Oliveira
Pintura - 126 x 106 x 3 cm Pintura - 49.6 x 41.7 x 1.2 inch
11.995 US$
Anatomías descriptivas IV -serie cuerpos y almas-
José Fernández Morán
Pintura - 48 x 67 x 0.3 cm Pintura - 18.9 x 26.4 x 0.1 inch
1.273 US$
S'attarder un instant
Cécile Desserle
Pintura - 89 x 116 x 2 cm Pintura - 35 x 45.7 x 0.8 inch
4.300 US$
The man (after pina bausch) forbidden collage (6)
Julien Delagrange
Pintura - 65 x 50 x 0.1 cm Pintura - 25.6 x 19.7 x 0 inch
2.716 US$
Farniente (Diptyque)
Maude Ovize
Pintura - 100 x 101.5 x 3 cm Pintura - 39.4 x 40 x 1.2 inch
2.490 US$
The victory of Icarus (1) forbidden production (1)
Julien Delagrange
Pintura - 200 x 140 x 0.1 cm Pintura - 78.7 x 55.1 x 0 inch
8.148 US$
Baltic Aphrodite
Kateryna Ocheredko
Pintura - 70 x 50 x 2 cm Pintura - 27.6 x 19.7 x 0.8 inch
1.100 US$
The Nightwatch
Diederik Van Apple
Pintura - 100 x 140 x 4 cm Pintura - 39.4 x 55.1 x 1.6 inch
6.167 US$
The Sea’s Temptation
Kateryna Ocheredko
Pintura - 50 x 70 x 2 cm Pintura - 19.7 x 27.6 x 0.8 inch
1.100 US$
The Orange Thieves
Halyna Abramova
Pintura - 80 x 100 x 2 cm Pintura - 31.5 x 39.4 x 0.8 inch
1.132 US$
Letter to Olive
Obiora Anamaleze
Pintura - 129.5 x 105.4 x 2.5 cm Pintura - 51 x 41.5 x 1 inch
1.850 US$
Sans titre
Franciszek Starowieyski
Pintura - 21 x 30 x 0.2 cm Pintura - 8.3 x 11.8 x 0.1 inch
679 US$
Sans titre
Franciszek Starowieyski
Pintura - 21 x 30 x 0.2 cm Pintura - 8.3 x 11.8 x 0.1 inch
679 US$
Allégorie
Franciszek Starowieyski
Pintura - 21 x 30 x 0.2 cm Pintura - 8.3 x 11.8 x 0.1 inch
679 US$
Pour the blood of the Gods
Elizabeth Hefty-Khoury
Pintura - 159 x 89.75 x 0.1 cm Pintura - 62.6 x 35.3 x 0 inch
2.252 US$
Ausente
José Luis Pagador Ponce
Pintura - 73 x 60 x 3.5 cm Pintura - 28.7 x 23.6 x 1.4 inch
2.263 US$
Figments of Imagination
Elizabeth Hefty-Khoury
Pintura - 78.7 x 62.2 x 4.4 cm Pintura - 31 x 24.5 x 1.7 inch
1.279 US$
Dissolution I
Elizabeth Hefty-Khoury
Pintura - 122 x 48 x 2 cm Pintura - 48 x 18.9 x 0.8 inch
1.539 US$
XIII. From The Red Series
Megha Joshi
Pintura - 29.7 x 21.1 x 0.3 cm Pintura - 11.7 x 8.3 x 0.1 inch
1.200 US$
Poussières d'étoiles 03
Théo Le Franc
Pintura - 116 x 73 x 2 cm Pintura - 45.7 x 28.7 x 0.8 inch
1.245 US$
Domaine Faiveley bleu
Jérôme Mesnager
Pintura - 31 x 52 x 1 cm Pintura - 12.2 x 20.5 x 0.4 inch
1.358 US$
Domaine Faiveley
Jérôme Mesnager
Pintura - 31 x 52 x 0.5 cm Pintura - 12.2 x 20.5 x 0.2 inch
1.358 US$
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Pintura Desnudos
El desnudo es un estilo artístico que remonta a la Antigüedad y atraviesa la historia del arte. Forma parte de la base de la formación artística clásica, con la tradición de realizar bocetos a partir de un modelo vivo en taller. Del realismo a la abstracción, el desnudo sigue poblando la pintura contemporánea, sobre todo ahora que vivimos en un mundo donde la imagen y la apariencia están al centro de la atención. Exploremos juntos la historia de la pintura de desnudos…
La representación de cuerpos desnudos está presente en el arte desde la Antigüedad, y se encuentra sobre todo en los bajorrelieves de Egipto. De la Antigua Grecia, heredamos principalmente las representaciones de cuerpos perfectos. Héroes y dioses con torsos definidos y cuerpos atléticos están abundantemente representados en esculturas o jarrones.
Posteriormente, el arte romano se inspiró mucho en los desnudos griegos. Tras una pausa en la Edad Media, con el dominio de la religión católica, la pintura de desnudos volvió con fuerza durante el Renacimiento. Las investigaciones de anatomía se reflejaron en el arte. Artistas como Miguel Ángel y Alberto Durero se distinguieron particularmente pintando desnudos sobre lienzo.
No fue hasta 1568, con la contrarreforma protestante, que se prohibió la pintura de desnudos en los lugares de culto. Los artistas recurrían entonces a trucos como taparrabos, las melenas de los sujetos o las cortinas. Por supuesto, las grandes familias de la época, como los Medici, siguieron encargando cuadros de escenas mitológicas en las que se representaban desnudos...
A partir de entonces, la pintura de desnudos fue testigo de su tiempo, reflejo de las normas y la política vigentes entonces en un determinado territorio. Cuerpos heridos, dramáticos y exagerados a la manera de Rembrandt o Caravaggio marcaron el arte barroco. Más adelante, ocurre una vuelta a lo antiguo en el neoclasicismo con desnudos en escenas de guerra con el romanticismo…
El desnudo es un verdadero reto para los pintores, ya que es muy difícil de dominar. Sobre todo porque durante el siglo XIX las pinturas de desnudos estaban muy codificadas para ser aceptadas. Un desnudo debía representar la pureza, la virginidad, y debía inspirarse en la antigüedad y recordar la figura religiosa.
Con la llegada del Romanticismo, el desnudo pudo asumir su sensualidad sin escandalizar. Es al auge del realismo que ciertos desnudos provocaron un escándalo. Destacan "Olympia" de Manet y "El origen del mundo" de Courbet, que rompen completamente con las convenciones pictóricas de la época, tanto en la actitud de la modelo como en su posición social o en la escenografía.
A lo largo de los siglos, la representación del cuerpo desnudo ha reflejado los cánones de belleza de las sociedades, pero también sus miedos. Los cuerpos demacrados de Egon Schiele o la paleta de colores pálidos de Lucian Freud reflejan el estado de ánimo torturado de una época, más allá de una simple estética personal. Entre los grandes nombres del arte moderno y contemporáneo que se han lanzado en este género figuran los artistas Gustav Klimt, Francis Bacon, Jenny Saville, Eric Fischl y Philippe Pearlstein.
Entre los desnudos imprescindibles de Artsper, no se pierda los cuerpos azules intensos de Isabelle Lebret, los cuadros de Etienne Gros o los trazos sueltos y poéticos de Ottelien Huckin, así como muchos más cuadros de galerías de arte internacionales.
Los artistas suelen representar figuras desnudas en sus cuadros y hay diferentes razones para ello. Algunos artistas quieren representar la belleza de la forma humana, mientras que otros quieren expresar ideas o emociones a través de la figura desnuda, dándole así un significado más profundo, como una alegoría.
Los artistas representaron con frecuencia la desnudez durante el Renacimiento debido al redescubrimiento del arte antiguo griego y romano. Esta repotenciación se denomina "neoclasicismo". Durante este periodo, las representaciones clásicas del desnudo en la escultura se consideraban la forma más elevada de arte y una evocación de la belleza ideal.
Las estatuas desnudas, que eran populares en la Antigüedad, empezaron a considerarse como una representación de un pasado "pagano" durante el periodo medieval en Europa, dominado por la Iglesia católica. Las representaciones de estatuas desnudas en los manuscritos medievales representaban la idolatría, aunque ciertas profundizaciones de los desnudos, como la crucifixión, eran aceptables. En general, la vestimenta era un signo de cristianismo y modestia.