

Biografía
Federico Zandomeneghi (1841-1917) fue un pintor italiano asociado al movimiento impresionista. Nació en Venecia en una familia de artistas (su padre, Pietro, y su abuelo, Luigi, eran reconocidos escultores neoclásicos), pero decidió dedicarse a la pintura. En 1856 se inscribió en la Academia de Bellas Artes de Venecia, continuando luego su formación en la Academia de Bellas Artes de Milán.
En 1859, para evitar el reclutamiento en el ejército austríaco, Zandomeneghi abandonó Venecia. Al año siguiente, en 1860, intentó unirse a las fuerzas de Giuseppe Garibaldi en la Expedición de los Mil, un movimiento que tenía como objetivo la unificación de Italia. Esta implicación le llevó a alejarse de Venecia y, en 1862, se instaló en Florencia donde frecuentó el Caffè Michelangiolo. Allí conoció a los artistas conocidos como Macchiaioli, como Telemaco Signorini, Giovanni Fattori y Giuseppe Abbati, y se unió a ellos para pintar paisajes al aire libre. Este enfoque innovador aporta vivacidad y espontaneidad a la reproducción de la luz.
En 1874, Zandomeneghi viajó a París, donde pasaría el resto de su vida. Allí conoció a los impresionistas, que acababan de celebrar su primera exposición colectiva. Su estilo pictórico, similar al de ellos, le permitió participar en cuatro de sus exposiciones posteriores, en 1879, 1880, 1881 y 1886. Cercano a Edgar Degas, también admiraba la obra de Mary Cassatt y Pierre-Auguste Renoir. Sus numerosas pinturas de mujeres en sus rutinas domésticas están inspiradas en estos artistas. Para complementar los escasos ingresos provenientes de la venta de sus pinturas, Zandomeneghi trabajó como ilustrador para revistas de moda.
A principios de la década de 1890 comenzó a pintar al pastel, técnica en la que llegó a ser especialmente hábil. En esa época, su reputación creció cuando el comerciante de arte Paul Durand-Ruel introdujo sus obras en los Estados Unidos, asegurando un éxito modesto pero constante hasta su muerte en París en 1917. Las obras de Zandomeneghi se distinguen por sus representaciones delicadas e íntimas de la vida cotidiana, particularmente de mujeres en momentos de tranquilidad y reflexión. Sus cuadros, como "Las dos hermanas" (1895) y "Place d'Anvers, París" (1880), ilustran su habilidad para capturar la luz y la atmósfera, características del impresionismo.
Hoy en día, las obras de Zandomeneghi se encuentran en colecciones públicas y privadas de todo el mundo, lo que da testimonio de su importante papel en el desarrollo del impresionismo y de su capacidad para fusionar las tradiciones artísticas italianas con las innovaciones francesas de su tiempo.
Entre sus obras más destacadas se incluyen Impresiones de Roma (1872), En la cama (1878), Madre e hija (1879), Despertar (c. 1880), Aburrimiento (c. 1890) y La última mirada (c. 1890). Zandomeneghi también participó en varias exposiciones, incluida la Bienal de Venecia de 1914, donde se le dedicó una exposición. Sin embargo, no tuvo el éxito esperado entre los críticos de la época. Su legado artístico sigue siendo significativo, ilustrando la riqueza de los intercambios culturales entre Italia y Francia a finales del siglo XIX y la importancia de la experimentación artística en la evolución de los movimientos pictóricos.
