Colette Levine nació en París, donde vive y trabaja en su estudio. Tras estudios artísticos con André Lhote (Montparnasse, 1954), luego con Yves Hersent (La Grande Chaumière, 1956) y finalmente con Robert Lesbounit (Place des Vosges, 1960), inició una investigación en torno al cuerpo y su luz. Luego se acerca al paisaje y la naturaleza de una manera más abierta, más colorida donde desaparecen las fronteras entre lo figurativo y la abstracción, dejando que el color y la línea se expresen de una manera más explotada. Renueva el arte del retrato y el paisaje en carboncillo, tiza roja, pastel o al óleo en su estudio y participa en numerosas exposiciones colectivas en Francia y en el extranjero.