Antoni Tapies

Antoni Tàpies es uno de los pintores españoles más emblemáticos del panorama artístico español del siglo XX. Murió en 2012 en su ciudad natal, Barcelona, y deja tras de sí unas obras muy misteriosas que le valieron el Premio Wolf Art Foundation en 1981 y la Medalla de Oro Picasso de la UNESCO en 1993, entre otros… Muy joven, ya estaba interesado en pintura pero decidió estudiar derecho.

Obligado a suspender sus actividades durante dos años a causa de una infección pulmonar, aprovecha su convalecencia para sumergirse en la literatura, el estudio de la historia del arte, la filosofía y la música romántica. La cultura de la que se alimenta guiará fuertemente su creación. En 1942, fue víctima de un ataque de taquicardia que le provocó alucinaciones, este episodio lo acercó a su deseo de practicar su arte. Se reconoció en los movimientos dadaísta y surrealista y creó el movimiento “Dau al Set", rompiendo con el academicismo franquista. Cuando llegó a París en 1951, conoció a los modernos de la época como Braque y Chagall, quienes lo instruyeron en ciertas técnicas artísticas: gotear, rayar.

Su perfil médico sin duda evoca el de muchas figuras del Art Brut, pero este no es el único aspecto que lo une al movimiento. De hecho, la combinación de material artístico ensamblado y materiales cotidianos es característica de Art Brut. Poco estético, su obra también navega en el Arte Povera. Su aprovechamiento de los residuos se acentúa con la aparición del Pop Art donde los objetos desprovistos de alma se privilegian en la creación como respuesta a la sociedad de consumo. Da gran importancia al simbolismo de los colores, y en particular al rojo, omnipresente en su paleta, que recuerda la violencia de la guerra. Elementos simbólicos manchan sus obras: números, iniciales, colores, haciéndolas místicas e indescifrables.