Elisha Ongere

Como muchos artistas africanos, Elisha Ongere descubrió su talento artístico a base de pruebas y experimentos cuando era niño. Lo sorprendente es que ya sabía que quería ser pintor cuando estaba en la escuela primaria. En concreto, el interés de sus compañeros y profesores por sus dibujos y pinturas le animó en su intención.

A lo largo de los años, siguió mejorando su técnica y habilidad, y a principios de la década de 1990 vendió por primera vez sus obras en galerías.

Desde entonces, los óleos abstractos africanos de Elisha Ongere han sido comprados no sólo en Kenia, sino que han atraído la atención de todo el mundo, incluidos Estados Unidos, Francia, Alemania, Reino Unido, Suiza, Japón y varios otros países.

Elisha Ongere está casado y tiene tres hijos.