Entre collages tridimensionales e instalaciones arquitectónicas, la obra de Lucia Tallová es un lenguaje visual en sí mismo. La disposición de objetos e imágenes, que habitan cada una de las obras cuidadosamente exhibidas, nos transporta a un mundo extraordinario, perdido entre sueños oníricos y realidad ordenada. Con la memoria como tema principal, el enfoque artístico de Lucía nació de un primer trabajo de colección y archivo. El objeto en posesión del artista es revisitado para luego encontrar su lugar en un gabinete de curiosidades, como el nuevo carácter de un paisaje narrativo escénico y contemplativo. Como una historia trilogía, cada proyecto es una continuación del anterior y nos prepara para el que seguirá. Es también en esta lógica que nació la exposición "Montañas entre nosotros", como secuela de su primera novela como "Construyendo una montaña", presentada en 2019 en la Galería París-Beijing. Para esta nueva exposición, Lucia pone la ciudad de París en el centro de atención a través de su nueva serie Paris Diary, producida entre agosto y septiembre de 2020 durante su residencia en la Cité internationale des Arts de París. Un verdadero diario de viaje compuesto por materiales antiguos y antigüedades recuperados durante su estancia y luego utilizados para realizar imágenes y objetos. Su última instalación Looking Through, construida como una ventana entre el interior de la galería y la calle, reinventa el espacio de la exposición jugando con los conceptos de espejos y dualidad a través de la mirada del espectador. Junto a estas dos series también se presentarán otras obras del artista y en particular una selección de su serie de Nubes. Kant afirmó que a pesar de todo entendimiento real, la imaginación humana siempre se esfuerza por identificar formas en las nubes, porque este juego de percepción le da la "sensación interna de un estado mental armonioso". Por el contrario, las nubes de Lucía llevan un mensaje secreto e indecodificable, escondido entre la belleza etérea y el movimiento opresivo. Instalaciones, pinturas, asociaciones de objetos cotidianos despersonalizados y estudios fotográficos se exponen a nuestra mirada. Se subliman para renacer, animados con un significado nuevo y poético. Es en este acto de montaje donde nace la escultura final, efímera y atemporal; luego se integra en su entorno expositivo para crear nuevas formas y estéticas. Las superficies trabajadas por Lucía se trascienden, tanto en la forma como en su naturaleza profunda, y de ese encuentro nace finalmente la obra.