Gerhard Doehler

Gerhard Doehler nació en 1953 en Karlsruhe (Alemania). Vive y trabaja en el sur de Francia. Lo primero que llama la atención al entrar en un espacio ocupado por Gerhard Doehler es la ligereza, la luminosidad, las vibraciones de color de las habitaciones y el espacio. Los soportes son variados, pero todas de formas muy sencillas: líneas, cuadrados, pero sobre todo círculos. Estas formas no evocan en sí mismas nada particular, no se refieren a ningún objeto, a ninguna función, que permita identificarlas o incluso compararlas. Se imponen por la obviedad de su estado, de su presencia y en cierto modo constituyen modelos arquetípicos, y parecen estar ahí sólo como soporte de color y luz. Los colores se reducen a unas pocas líneas, a superficies que en definitiva son bastante pequeñas, a veces incluso, a primera vista, no las vemos aunque las percibamos. Para dar esas vibraciones que traen el color y la luz que emanan de sus círculos, el artista pasa por una obra que supone una ejecución rigurosa. Se pulveriza la pintura acrílica, se lijan las sucesivas capas de barniz. Estas operaciones, repetidas varias veces, permiten ofrecer el color, sus reflejos y sus sombras, toda su intensidad. El cambio a soportes de aluminio también permitió reforzar estas vibraciones.