Priska Lorane

"Quiero pintar ...". Así resume la artista Priska Lorane su relación con la pintura, visceral ... Pintora de oro y amanecer, también de crepúsculo, sus obras de muaré oscilan entre la sombra y la luz. Inspirándose en el corazón de la ciudad, a menudo se ve atrapada allí por los rostros de las mujeres, a las que escudriña, y cuyas miradas a veces distantes, a veces profundas, le cuentan su vida ... o tal vez la de ella. Queriendo recrear esta empatía a través de sus obras, busca establecer un diálogo de emociones con el lienzo. Luego, mirando hacia arriba, descubre los tejados y los cielos que los tocan. Los pinta hipnóticos, conmovedores y reflejando una historia para revivir, nuestra historia tantas veces. "Nuestra historia, porque los lienzos que pinto solo tienen sentido si su público hace un trabajo de introspección. No quiero un lienzo congelado por mis propios sentimientos. Quiero que quien lo posea pueda sentarse, penetrarla y animarla con su pensamientos propios. " Y lo hace magníficamente.