Vasco Ascolini

Vasco Ascolini nació el 10 de mayo de 1937 en Reggio Emilia donde vive y trabaja. Se inició en la fotografía en 1965. De 1973 a 1990 fue fotógrafo oficial del Teatro Municipal "Romolo Valli" de Reggio Emilia. Sus fotografías teatrales han entrado en las colecciones del Museo Metropolitano de Nueva York, MOMA en Nueva York (sección de Artes Escénicas), el Museo Guggenheim de Nueva York y en numerosas colecciones de museos de Estados Unidos, Europa y otros países. El Museo de Fotografía de Mannheim en Alemania conserva la serie de fotografías teatrales pertenecientes a la colección personal de Helmut Gernsheim. En 1985 se organizó una gran exposición retrospectiva de sus fotografías de espectáculos en el Lincoln Center de Nueva York. Sin dejar de publicar y exponer estas imágenes, en 1970 comienza a fotografiar patrimonio y arquitectura, dando siempre una gran importancia al blanco y negro, que ya lo caracterizaba en la fotografía teatral. En la década de los 80 recibe un encargo institucional para un trabajo fotográfico sobre la ciudad de Aosta. Cada pedido será procesado exclusivamente según su visión personal. El texto de Ersnt H. Gombrich, que acompaña a sus imágenes en el catálogo de la exposición de Aosta, será crucial. Vasco Ascolini intercambiará con él una larga correspondencia sobre su obra, como posteriormente con Gersheim, Aaron Scharf y Jacques Le Goff, otros intelectuales que contarán en su carrera. El encuentro con Michèle Moutashar también será decisivo. Al encomendarle un encargo para la ciudad de Arles que se expondrá en 1991 en el RIP, le ofrece un público internacional en este nuevo campo fotográfico. Recibe la medalla de la ciudad de Arles. En 2000 Vasco Ascolini participó en la exposición colectiva "Según la antigüedad" organizada por el museo del Louvre, que presenta por primera vez una exposición dedicada a la fotografía como tal. También en 2000, fue nombrado "Caballero de la Orden de las Artes y las Letras" por el Ministerio de Cultura francés. En 2001, a su obra le dedicó una tesis de Danièle De Luigi, hoy crítica e historiadora del arte y la fotografía.