Maria Helena Vieira da Silva

Maria Helena Vieira da Silva, nacida en Lisboa en 1908, precursora del paisajismo abstracto, revolucionó la composición pictórica del siglo XX. Se inició en la pintura en Lisboa en 1928 y luego se trasladó a la capital francesa. Se incorporó a La Grande Chaumière y la Académie Scandinave. Se formó con artistas de renombre como Fernand Léger, Antoine Bourdelle, Charles Despiau, Othon Friesz y Roger Bissière. Se incorporó a la escuela de París que reúne a los grandes artistas extranjeros. La composición de sus obras desvirtúa fuertemente las tendencias de la época. Un laberinto de líneas se apodera del lienzo, converge hacia un punto de fuga y lleva nuestra mirada al infinito fuera de la pantalla. Inspirándose en el urbanismo y la arquitectura, podemos percibir perfectamente su sed de conocimiento a través de este cúmulo de líneas que orienta nuestro pensamiento hacia lo desconocido. También reproduce estos mosaicos en tapices y cerámicas. El espacio está fragmentado como en las obras de Cézanne, los colores evocan las paletas del arte abstracto y el cubismo. La novedad que aporta a la creación artística será recompensada muchas veces: en el gran premio de la bienal de Sao Paulo en 1961, en el Gran Premio Nacional de las Artes en 1963, ganó el título de "Caballero de la Legión de Honor". En 1979. Murió en 1992.