Pierre Bodo

Pierre Bodo nació en 1953 en un pueblo de Bas-Congo, y murió en marzo de 2015 en Kinshasa (RDC), ciudad a la que se mudó en 1970. En cuanto a la mayoría de los artistas de Kinshasa, sus primeros pasos en la pintura están hechos. con fines publicitarios. Abrió su primer taller en 1972. A fines de la década de 1970, se convirtió y se unió a la iglesia pentecostal. Esta transformación se siente en su arte, y durante veinte años, Pierre Bodo subordina su pintura a su compromiso religioso, que se convierte en una gran fuente de inspiración. Así, sus obras están pobladas por hechiceros y demonios, combatidos por divinas fuerzas redentoras. Sin embargo, su libertad estética es total, y reinterpreta totalmente a su manera los temas religiosos a los que se apega. En la década de los 90 se abre a nuevos horizontes y profundiza la naturaleza sobrenatural de su pintura alejándose de los temas religiosos. Pintó sociedades de hombres elegantes con cabezas de pájaro. Están muy preocupados por su apariencia y, como los pájaros, reajustan constantemente su plumaje, sintiendo la necesidad de ser perfectos todo el tiempo. Una sutil reflexión sobre la autoimagen. Pastor, Pierre Bodo también lleva años al frente de una ONG local. Su universo sobrenatural le valió el sobrenombre de "Bosch africano". Líder del arte africano contemporáneo, sus obras se expusieron notablemente en la Fundación Cartier en 2015 durante la retrospectiva “Beauté Congo - Congo Kitoko”.