Gérard Prévost

En sus inicios, después de estudiar fotografía, Gérard Prévost se sumergió en este arte y se convirtió en fotógrafo al mismo tiempo que le fascinaba el dibujo al carboncillo, el dibujo a lápiz y la pintura figurativa. Realizó más de cincuenta dibujos de antiguas puertas y calles de París luego comenzó a pintar sus primeros lienzos con pintura al óleo, trabajando principalmente en el acercamiento del cuerpo femenino y masculino, trabajo que le valió varias exposiciones. Realiza frescos para grandes hoteles y lugares de prestigio. Tras un paréntesis de varios años para dedicarse al diseño gráfico y a la dirección artística de la revista Glint, creada con su pareja (revista dedicada al arte, la fotografía y la belleza), decide volver a su primera pasión, la pintura. . Con una creatividad desbordante, abandona lo figurativo y transpone su imaginación hacia una pintura más contemporánea. Entre la sombra y la luz, juega con la textura y la materia y nos lleva a un viaje emocional. Su pintura se expresa en gran formato. Su escritura es convincente.