Fabrizio Corneli

Nacido en Toscana en 1958. Vive y trabaja en Florencia. En 1979 expone por primera vez en el Palais des Expositions de Roma con obras sobre la luz. Siempre fascinado por los temas de la luz y la sombra, los convierte en el medio favorito de su investigación. Heredero de una tradición científico-artística toscana, Corneli combina arte y ciencia, tecnología y belleza, razonamiento abstracto e imagen. A la luz del día, las imágenes de Fabrizio Corneli apenas se muestran. Como apariciones evanescentes, prefieren emerger a la luz de una vela (o su progenie halógena), al anochecer. Fabrizio Corneli corta hojas de papel (o cajas de cobre, o cáscaras de huevo ... o cualquier otro medio, porque experimenta constantemente), sobre las que luego dirige los rayos de luz. Un mundo de imágenes sorprendentes se despierta poco a poco en la pared, dejando pasar ante nuestros ojos a veces las obras maestras de la escultura griega o del Renacimiento italiano, a veces un universo fantástico de elfos y centauros, de dragones y búhos, o incluso efigies de jóvenes soñadores, siluetas de viajeros exóticos. Para dar vida a este universo encantador, Fabrizio Corneli tuvo que dominar a la perfección las leyes de la óptica y la física con todo lo relacionado con la anamorfosis, las proyecciones de sombras y la refracción de la luz. A la luz del día, el espectador ni siquiera puede imaginar vagamente cómo se verán las proyecciones en las paredes de estas siluetas abstractas después del anochecer. Además, el propio artista, cuando recorta sus formas en zigzag, trabaja, por así decirlo, "en la oscuridad" porque no ve exactamente cuál será la imagen. Cuestión de experiencia, técnica y azar. Sus obras se pueden encontrar en varias instituciones y museos importantes en Italia y en el extranjero.