Catalina Escallón Rosselli

Catalina Escallón Rosselli es comunicadora visual interdisciplinaria y narradora. Es una diseñadora gráfica colombiana con experiencia en marketing, diseño y desarrollo de productos en la industria textil y de interiores. Catalina se mudó a Nueva York en 2014 para obtener su maestría en Gestión de Moda en el Fashion Institute of Technology.

Mientras estaba en la escuela, Catalina se dedicó a la industria de interiores donde aprendió y dominó diferentes conocimientos y técnicas textiles. Trabajó en la industria durante seis años hasta 2020, cuando incursionó por su cuenta. Catalina cree en el poder del pensamiento estratégico y la creatividad de cada individuo, lo que la llevó a fundar Noodo, un estudio acelerador de ideas donde trabaja con equipos para ayudarlos a encontrar soluciones creativas y desarrollar sus habilidades para resolver problemas.

Le gusta empoderar a otros para que resuelvan problemas de forma creativa y experimenten con hilos. Catalina enseña y comparte sus técnicas para crear una comunidad y una conversación sobre foto, hilo, colores y composición. Catalina cree en el poder de la autenticidad y la artesanía, que aporta a su trabajo todos los días. Su mayor pasión es ampliar aún más su conocimiento de los textiles y el arte de hacer.

La textura y la dimensionalidad han sido un hilo común a lo largo de su carrera, y ahora las trae a la fotografía. En su trabajo, puedes captar su fondo e inspiración textil. Ella superpone el bordado en la fotografía con patrones intrincados que combinados con su lente compositiva crean piezas interesantes, coloridas y con textura.

Catalina Escallon Rosselli es una artista colombiana radicada en Brooklyn, Nueva York. Con su arte, explora la intersección entre el diseño gráfico y el textil. Sus piezas tienen como objetivo unir el espacio digital y analógico. Son una invitación al tacto y una exploración de diversas técnicas textiles. Catalina aporta dimensionalidad al estampado y utiliza el bordado para contar historias y crear recuerdos. Hace siete años, Catalina se mudó al extranjero y con esa elección vino la incertidumbre y la lucha.

Desde entonces, ella ha luchado con un sentido de pertenencia. Mientras vivía en Brooklyn, encontró un nuevo significado en los lugares en los que había estado al ver estas experiencias de una manera diferente. Esto desencadenó la nostalgia y la hizo pensar en estos lugares y en cómo su identidad está siendo moldeada constantemente por ellos.

Más importante aún, se dio cuenta de que no es un lugar específico lo que le da forma, sino la construcción de muchos. Este cuerpo de trabajo es una creación de sus propios espacios y cómo la hacen sentir. Quitar el color es intencional. Al volver a colorear una parte de la fotografía con hilo de colores, se reinventan tanto los espacios como los recuerdos que contiene. El color y la textura hacen que las personas experimenten y sientan el momento y la fotografía. La intención es utilizar el contraste entre la fotografía y el hilo de color como una forma de llamar la atención del espectador desde lo micro (color, edificio, espacio) hasta lo macro (memoria).