Lenor Bingham

Hija de un inventor y una artista, la pintora estadounidense Lenor Bingham creció en Long Island, entre los extravagantes artilugios de su padre y las esculturas de su madre. Los frecuentes viajes a los museos estimularon su pasión por el arte moderno y el expresionismo abstracto, mientras que los viajes de la infancia a América Latina animaron su paleta.

Bingham pinta delicados retratos de la vida familiar, viñetas oníricas que evocan recuerdos de la infancia, cuentos populares o tiernas declaraciones de amor a sus hijos. El deseo de intimidad y la conservación del núcleo familiar son temas recurrentes en su obra, aunque no se aborden abiertamente. La estética chagalliana de Bingham se consigue mediante capas de acrílico, acuarela y tinta, parcialmente lavadas con lejía. Este acto de cubrir y descubrir arroja pequeñas pistas sobre las historias subyacentes, lo que da lugar a obras poéticas de una complejidad textural sin parangón.

Bingham estudió arte con Toby Klayman en el Fort Mason Art Center de San Francisco. Expuso su arte en exposiciones individuales y colectivas en Portland, Oregón, y Nueva York. Entusiasta del vino, ávida excursionista y esteticista licenciada, ahora dirige un restaurante alemán con su marido. Trabaja y vive en Portland, Oregón.