Mélina Bismuth

La práctica fotográfica de Mélina Bismuth es una investigación sobre reconstrucción y regeneración. A través de sus ensamblajes digitales, el tema fotográfico omnipresente, las obras urbanas, se desvanece. Recompone su propia realidad, a través de una obra abstracta y pictórica, sensible y atemporal.

Sus grandes ensamblajes fotográficos están hechos a partir de fotografías de obras de renovación urbana. Lonas de andamios, escaparates cerrados encalados con blanco Meudon, reflejos en los cristales... tantas pantallas que ocultan las obras y delimitan la frontera entre el mundo interior y el mundo exterior, desgastado por el tiempo, el polvo, el roce.

Su colección de miles de fotografías se convierte en una paleta de colores y texturas, un material para modelar.

La palabra "reconstruir" resume su gesto artístico. Pasa por un largo proceso de fragmentación de cientos de fotografías, luego de reconstrucción (ensamblarlas meticulosamente para resaltar el movimiento, el relieve, la profundidad).

El trabajo final es una impresión fotográfica pigmentada sobre papel mate. El espectador, embargado por el movimiento de esta superficie que cobra vida, se pregunta por la naturaleza misma de la obra y, por tanto, por los límites entre la fotografía y la pintura abstracta. Descubre observando atentamente este material, efímero, en degradación, sublimado.