Eva Lemay

¿Qué hacer con las luces, los cielos, los mares y las extensiones de tierra que tantos otros artistas han pintado con tanto agrado? ¿Cómo trascender lo visible para evocar emociones, sensaciones, viento, calor, delicadeza y fuerza? Intento alejarme de la imagen para provocar la mirada, la reflexión, el diálogo...

Estoy buscando una manera de conectar objetos figurativos, lugares a menudo recordados, a una escritura abstracta usando color, relieve, movimiento, desenfoque.

Mi reflexión es a la vez estética, poética y emocional.

Primera mirada, tacto, memorización

Luego, en el taller, de forma muy intuitiva, recrea formas naturales transformadas por los filtros de la memoria y la emoción interior.

El color juega un papel dominante en la composición. Degradaré, matizaré, jugaré con las transiciones, borraré, rayaré para evocar espacios sin definirlos con precisión. A menudo trabajo con salpicaduras para que el gesto sea libre y la línea sea fluida y texturizada.

Me gustan las texturas ricas y las superposiciones que revelen relieves palpables, luces y sombras cambiantes.

La imagen está suspendida en el límite de la representación, los detalles son mínimos para dejar espacio a la imaginación. La vibración es primeramente cromática.
Mi mundo es un mundo onírico, a veces surrealista, un mundo lleno de colores y llamadas a soñar, un homenaje a la belleza de la vida, una invitación a perderse en la inmensidad misteriosa.