Presentación

El metal parece ser el rastro de migas de pan de Kamiya. En efecto, luego de formarse como escultor en su país de origen, nuestro artista se formó en 1976 en la Escuela Nacional de Artes y Oficios, sección metalúrgica. Es el metal lo que lo lleva a la escultura y no la escultura lo que lo lleva a trabajar con el metal. En esto encontramos en Kamiya toda la ambigüedad original que reside en la posición de los que se llaman artistas, esa frontera indefinida en perpetuo movimiento, como un juego de escape o diálogo con el artesano. Mirando de cerca la obra de Kamiya y sobre todo la manera en que la describe, damos vueltas, vueltas y encontramos las nociones de montaje y superposición, pues así prefiere definir sus obras, refiriéndolas a la acción plástica única y su dimensión programática. . Incluso podríamos ir más allá convocando a la del bricolaje en el sentido noble del término.

En efecto, uno encuentra en su estudio de artista en Palaiseau láminas de madera contrachapada, rollos de plomo, alicates, máquinas, herramientas de soldadura y corte, una botella de oxígeno, etc., junto a un pequeño estante de barnices y tintas. En resumen, un universo que invoca nuestra imaginación del artesano, el manitas más que la del pintor, y después de todo, ¿por qué no? Al otorgar un lugar central al ensamblaje en su obra, el artista japonés reproduce la relación significante/significado. Se trata de cuestionar nuestra relación con el signo, con el lenguaje. Superpone elementos simples, en un registro no referencial: semiesferas plásticas, rectángulos o cuadrados de plomo pintado, figuras geométricas en tinta, etc. Pero es en el montaje, en el retoque, en la superposición de estos “insignificantes" donde opera la magia. Hay una apariencia simple del objeto y una complejidad (superable) de la mirada para desentrañar la estratificación secuencial del ensamblaje.

Esta organización se vuelve autorreferencial y modular, tiene un vínculo con el minimalismo. Pero las esculturas de pared de Kamiya son, en última instancia, no solo texturas, colores, relieves. Sólidos y vacíos juegan con la luz y el momento en una estética de presentación y trabajo autónomo. Al referirse a la cadena de operaciones plásticas, por tanto también concretamente a la unidad de duración, al tiempo presente que contiene el pasado y el futuro, sus obras van más allá de la desubjetivación moderna. Nos muestra puramente a través de su lenguaje plástico, la fotografía de un fragmento de un estanque en Japón. En la superficie reconocemos las primeras hojas muertas de la estación, las del otoño pasado que aún flotan, y otras también, más oscuras, casi negras, que datan de años pasados. En las profundidades del agua clara, se vislumbra la sedimentación de hojas aún más viejas, mientras que la superficie refleja los árboles altos y verdes. Las Superposiciones de Kamiya, cercanas al sintoísmo, proponen una estructura simbólica de esta temporalidad donde cristalizan, en un solo lugar, el pasado, el presente y el después. En otro nivel, cada una de sus obras, fechadas, también sigue superponiéndose a obras anteriores y relacionándose con la obra por venir. Renovando su obra, el artista nos ofrece hoy en esta exposición ir más allá, incluso revertir su universo esencialmente compuesto por el negro -reino de sombras y luces- para venir en paralelo a explorar el blanco en todos sus matices, como un nuevo territorio, un nueva mirada a sus mezclas.


Leer más
Todas las Takahisa Kamiya
Pintura, 150222, Takahisa Kamiya

150222

Takahisa Kamiya

Pintura - 57 x 44 x 7 cm Pintura - 22.4 x 17.3 x 2.8 inch

Vendida

Descubre nuestras selecciones de obras de artistas

¿Necesitas ayuda para encontrar tu favorito? Consulta nuestras páginas de selección hechas para ti.
¿Necesita saber más?

¿Cuáles son sus 3 principales obras?

¿Cuándo nació Takahisa Kamiya?

El año de nacimiento del artista es: 1948