Reflexiones sobre Evanescence
Paris 10 de noviembre de 2013 a 8 de diciembre de 2013
Presentación
"Todo fluye y nada permanece, todo cede y nada permanece fijo." Heraklit
Dan Carabás está en busca del pequeño espacio que se abre entre los pensamientos y la intimidad de estos momentos supuestamente en privado. Fotografió a los protagonistas de sus fotografías en casa, y por lo tanto crea intimidad instantánea alimentado, similar a esos pensamientos fugaces ya evaporadas, al mismo tiempo que se producen.
Dan Carabás, las mentiras verdadera belleza en el movimiento natural y la magia del momento fugaz. Es en busca de una belleza más allá de la contemplación exterior, que nace de la interacción armoniosa de movimiento, el pensamiento y en el espacio. Recogido en el espacio y el tiempo, sus fotografías son un reflejo de la evanescencia del momento; y es precisamente en esta evanescencia radica su verdadera belleza. En una voz tranquila, similar a susurro, sus tiros implican al espectador a su paso por completo de la meditación. En el suave resplandor del día, que irradian paz, la armonía y la simbiosis, las ofertas naturales Un vistazo momentos de la vida de sus protagonistas, más íntimo y privado. Sin embargo, el ojo que es la luz que el espectador no es uno de estos cuadros robados por el ojo de la cerradura. La cámara se las arregla para ser a la vez presente e invisible, de modo que interactúa el espectador mucho más con la situación. Fue invitado a aprovechar el momento y para disolverla, al mirarlo, el flujo de la evanescencia, por un momento.
Leer más
Dan Carabás está en busca del pequeño espacio que se abre entre los pensamientos y la intimidad de estos momentos supuestamente en privado. Fotografió a los protagonistas de sus fotografías en casa, y por lo tanto crea intimidad instantánea alimentado, similar a esos pensamientos fugaces ya evaporadas, al mismo tiempo que se producen.
Dan Carabás, las mentiras verdadera belleza en el movimiento natural y la magia del momento fugaz. Es en busca de una belleza más allá de la contemplación exterior, que nace de la interacción armoniosa de movimiento, el pensamiento y en el espacio. Recogido en el espacio y el tiempo, sus fotografías son un reflejo de la evanescencia del momento; y es precisamente en esta evanescencia radica su verdadera belleza. En una voz tranquila, similar a susurro, sus tiros implican al espectador a su paso por completo de la meditación. En el suave resplandor del día, que irradian paz, la armonía y la simbiosis, las ofertas naturales Un vistazo momentos de la vida de sus protagonistas, más íntimo y privado. Sin embargo, el ojo que es la luz que el espectador no es uno de estos cuadros robados por el ojo de la cerradura. La cámara se las arregla para ser a la vez presente e invisible, de modo que interactúa el espectador mucho más con la situación. Fue invitado a aprovechar el momento y para disolverla, al mirarlo, el flujo de la evanescencia, por un momento.
Dirección
-
18 rue Duret
75115, Paris
Francia
Detalles
Ninguna obra coincide con su criterio de búsqueda
Ningún artista coincide con su criterio de búsqueda