Ian Stone

Cuando era niño, recuerdo que gravitaba hacia ciertos objetos: objetos hermosos, elegantes y kitsch. Pasé gran parte de mi infancia en la casa de mis abuelos, llena de chucherías polvorientas y elegantes antigüedades victorianas. Perdí horas a solas con estos objetos de otro mundo, desarrollando una sensibilidad por lo decorativo. Pasaba el dedo por un par de caballos de bronce o pantallas de lámparas de satén y observaba cómo el polvo se levantaba y se depositaba encima de una figura de bailarina de porcelana que había debajo. Ordenaba y reorganizaba una colección de frutas de plástico en un cuenco de mimbre, descubriendo infinitas configuraciones. La máxima fantasía era imaginar cómo exhibiría esta colección de reliquias (aparentemente) invaluables en mi hogar algún día. Ahora soy dueño de estos objetos y les he encontrado un hogar en mi pintura.

Ian nació en Montreal, Quebec, donde actualmente reside y trabaja. Recibió su Licenciatura en Bellas Artes en Grabado tradicional de NSCAD en Halifax, Nueva Escocia, Canadá en 2004 y una Maestría en Pintura y Dibujo de la Universidad Concordia en 2007. Su trabajo se puede encontrar en numerosas colecciones públicas y privadas, incluido el Museo de la Universidad Estatal de Florida, y el Palacio Nacional de Cultura en Sofía, Bulgaria.

Declaración del artista:

Como pintor que se centra en la intersección de la belleza, el kitsch y lo camp en el arte gay, me atraen las formas en que los hombres homosexuales históricamente se han sentido atraídos por objetos que desafían las nociones tradicionales de belleza y las normas de género. A través de mi trabajo, exploro las formas en que la estética queer ha evolucionado con el tiempo y cómo esta estética se manifiesta en el arte que los hombres homosexuales eligen coleccionar.

En mi trabajo, me centro principalmente en retratos y colecciones de objetos, utilizando el realismo para capturar la belleza y complejidad de mis sujetos. Al pintar estos temas con intrincados detalles, espero sacar a la luz la subjetividad única que existe dentro de la cultura gay. Para mí, esta subjetividad es producto de las fuerzas sociales y culturales que dan forma a nuestras experiencias como personas queer, así como de las formas únicas en que navegamos por estas fuerzas. En última instancia, mi objetivo como artista es dar vida a estas ideas y explorar las complejas relaciones entre identidad, deseo y estética.