Vincent de Roder

Vincent de Roder nació en 1958 en los Países Bajos, y actualmente vive y trabaja en Wetteren, Bélgica.

Su trabajo podría describirse mejor como un estudio continuo de la línea. Horizontal, vertical u oblicua; repetido a menudo, o no. Líneas gruesas que se convierten en bloques, luego líneas finas, antes de desaparecer, las líneas se cruzan.

Pintura abstracta por excelencia, la obra de Roder da una gran claridad a la "nada" y nos lleva a percibir las muchas cosas con las que llenamos la nada, cuando la encontramos. Los pequeños accidentes de pintura se conservan y aprecian con gran precisión, inspirando ternura. Es precisamente esta ternura la que transforma la repetición de líneas (o bandas o bloques) en un gesto tautológico, una proposición aparentemente lógica, una cualidad indefinible.