Laura López Balza

Los dibujos y pinturas de Laura López Balza son enérgicos, íntimos, juguetones, desinhibidos y, a veces, ácidos. Con ellos muestra y difunde su entusiasmo por la infinita riqueza y variedad de lo observado, vivido e imaginado.

Su obra aborda las emociones primarias de forma apasionada y expresiva y narra su propia experiencia de vida a través de un mundo interior compuesto por cuentos protagonizados por la naturaleza, el paisaje o la vida cotidiana. Son historias mínimas; recordados, imaginados, vividos o idealizados, que reflejan anhelos, preferencias o miedos; pero siempre son un canto a la alegría de vivir. Laura pinta para ver, conocer y comprender, por eso su primera exposición en La Gran se tituló "Pintar para ver".

Formalmente, podríamos calificar su obra de antiacadémica, definida por su alta intensidad en la interacción cromática y un cierto primitivismo en la forma. Conecta con posiciones trascendentales en el arte contemporáneo que optan por no respetar rígidamente las leyes de la pintura ilusionista para lograr una mayor expresividad e interacción.