James Wigger

James Wigger nació en 1957 en Estados Unidos. Vive y trabaja en Portland, Oregon. Después de una carrera como diseñador gráfico, James Wigger recurrió a su primer amor, la fotografía. Utilizando cámaras vintage, busca lograr imágenes que tengan más energía, textura y emoción además de su búsqueda de belleza y variedad en películas instantáneas. La perfección no es su objetivo. Ha descubierto que lo que busca es el caos o la introducción de cosas sobre las que tiene poco control. El estado de ánimo, la emoción y la textura son sus principales objetivos. Quiere tomar fotos que parecen perdidas y gastadas, como reliquias de otra época. Por lo general, no le interesan las poses bonitas y no quiere que sus modelos se vean bien. Más bien, busca la emoción implícita. El misterio es su método favorito para contar una historia. Dejar que la gente use su imaginación para construir una historia le interesa más que contar una historia completa a través de sus fotos. Lo que realmente lo atrajo a la fotografía fue la película instantánea, y más específicamente Polaroid. Poder manipular procesos siempre ha estado en el centro de su historia de amor con el cine instantáneo. Debido a las reservas de películas cada vez más pequeñas, trabaja cada vez más con películas caducadas. Las imágenes “líquidas” obtenidas con la película instantánea y el caos de la película caducada le brindan la serenidad y el azar que constituyen un punto de partida en su obra. Utilizando Photoshop como su cuarto oscuro digital, intenta mantener sus ideas "en" la cámara, en lugar de reconstruirlas digitalmente.