Gilles Molinier

Es en el estudio de sus abuelos paternos, ambos coloristas, donde Gilles Molinier despierta al arte. Descubrió la fotografía a una edad muy temprana, adquirió su primera Nikon y luego produjo sus primeras ilustraciones y trabajos fotográficos. Entonces comprende que la fotografía es un lenguaje real, su modo de expresión. A los 24 años, Gilles Molinier creó una empresa de ingeniería informática que a menudo lo llevó a producir imágenes e integrarlas en proyectos de comunicación. En 2009 decide emprender un nuevo rumbo profesional para ejercer plenamente su profesión de fotógrafo de autor. Naturalmente, sus elecciones fotográficas se dirigen hacia el deporte y la naturaleza, entornos en los que siempre ha evolucionado. Gilles Molinier nos anima hoy a dar una mirada diferente a lo que nos rodea. Su eclecticismo subraya su curiosidad, su apertura al mundo y su mirada de múltiples ángulos resaltan las conexiones entre sus creaciones. Su trabajo nos confirma su determinación por capturar la quintaesencia de las imágenes y restaurar sus emociones.