Jean-Luc Breda

Jean-Luc Breda es un artista autodidacta que vive y trabaja en Reims en Champagne. Lleva veinte años practicando la pintura después de haber sentido emociones muy fuertes al descubrir la fuerza de la obra de Bacon o Basquiat. Atraído en un principio por el expresionismo y la libre figuración por la energía y el movimiento, avanza progresivamente hacia obras de gran formato al aire libre que le llevan a descubrir el poder del color y el juego de luces. Su incesante práctica de investigación sobre la transparencia y las interacciones cromáticas lo lleva al límite de la abstracción lírica, inspirándose en los grandes maestros, desde Turner hasta Zao Wu Ki. Alterna acrílico y óleo sobre tabla o sobre lienzo en sus formatos de caballete donde formas y luces se funden en una escritura artística sensible, instintiva y particularmente elegante en esta inquietante búsqueda de la luz que da al conjunto su apariencia tridimensional. Sensación de extrañeza, de un mundo irreal pero familiar y tan onírico. Su técnica, cercana al goteo, alterna medios y materiales en una incesante búsqueda de efectos. Pensamos en Victor Hugo y sus fantásticos dibujos cuando surgen espontáneamente formas extrañas, castillos en ruinas, mundo submarino, apocalipsis. Esta obra tiene sentido porque está íntimamente dirigida a cada uno de nosotros, un viaje fantástico hacia otra dimensión donde las sutiles asociaciones cromáticas nos revelan un mundo irreal, extraño e inexorablemente tan atractivo.