Presentación

Carla Tolomeo nació en Pinerolo, cerca de Turín, Italia, pero creció y estudió en Roma. Cuando aún era una niña, Giorgio de Chirico y más tarde Renato Guttuso, Franco Gentilini y Ugo Attardi la animaron a pintar.

En 1971 expuso sus obras, inspiradas en la pintura japonesa, en Lugano. El historiador y crítico de arte Giovanni Testori la presentó en la Galleria Cavour de Milán, que organizó su exposición individual Le storie di Erodiade. Después de trasladarse a Milán, Carla Tolomeo inició una nueva temporada artística activa, dando frutos sus estudios sobre las obras de los Viejos Maestros, Vittore Carpaccio, Alberto Durero y Leonardo.

Entre 1976 y 1980, Carla Tolomeo trabajó en diversos medios, incluyendo óleo, lápiz, aguafuerte y grabado, y expuso en varias ciudades de Europa: Viena, Ginebra, Zúrich, Atenas. Realizó una serie de dibujos y grabados dedicados a Giacomo Casanova, que fueron acompañados por las palabras de Leonardo Sciascia. Después de una experiencia en Paraguay, la obra de Carla Tolomeo volvería a encontrar su centro en Milán. Además de producir sus obras creativas, fue profesora de grabado en las Academias de Bellas Artes de Brera y Venecia.

En 1995, fue invitada a Mantova para exponer su serie Variazioni, basada en las obras de Mantegna. En 1997 las obras de Carla se exhibieron en las Leichester's Galleries de Londres con la exposición Tribute to Leonardo y en 1999 sus obras se exhibieron en el Museo de Arte Contemporáneo de Rijeka y luego en Zagabria en el Instituto de Cultura Italiana. En 1997, Carla Tolomeo exhibió por primera vez sus Sedie, las sillas esculpidas que marcan un punto de inflexión en su producción artística, asombrando a coleccionistas de todo el mundo con su diversión artística.

Como ella misma escribió en la presentación de su primer catálogo dedicado a las Sillas Esculturas, su filosofía es la mutación / transformación de cualquier objeto en un objeto artístico, comenzando por el elemento más simple del hogar: una silla. Fuerte por las vivencias, los estudios y el recuerdo de su antiguo maestro, Giorgio de Chirico, Carla Tolomeo es capaz de transformar la silla en algo mágico: un tótem, un tirón de peces, una flor gigantesca. Sus Sillas-Esculturas se convierten en algo mágico que trae recuerdos de la infancia, manteniendo el toque de picardía de quien ha vivido intensamente su vida.


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¿Quién es el artista?

Carla Tolomeo nació en Pinerolo, cerca de Turín, Italia, pero creció y estudió en Roma. Cuando aún era una niña, Giorgio de Chirico y más tarde Renato Guttuso, Franco Gentilini y Ugo Attardi la animaron a pintar.

En 1971 expuso sus obras, inspiradas en la pintura japonesa, en Lugano. El historiador y crítico de arte Giovanni Testori la presentó en la Galleria Cavour de Milán, que organizó su exposición individual Le storie di Erodiade. Después de trasladarse a Milán, Carla Tolomeo inició una nueva temporada artística activa, dando frutos sus estudios sobre las obras de los Viejos Maestros, Vittore Carpaccio, Alberto Durero y Leonardo.

Entre 1976 y 1980, Carla Tolomeo trabajó en diversos medios, incluyendo óleo, lápiz, aguafuerte y grabado, y expuso en varias ciudades de Europa: Viena, Ginebra, Zúrich, Atenas. Realizó una serie de dibujos y grabados dedicados a Giacomo Casanova, que fueron acompañados por las palabras de Leonardo Sciascia. Después de una experiencia en Paraguay, la obra de Carla Tolomeo volvería a encontrar su centro en Milán. Además de producir sus obras creativas, fue profesora de grabado en las Academias de Bellas Artes de Brera y Venecia.

En 1995, fue invitada a Mantova para exponer su serie Variazioni, basada en las obras de Mantegna. En 1997 las obras de Carla se exhibieron en las Leichester's Galleries de Londres con la exposición Tribute to Leonardo y en 1999 sus obras se exhibieron en el Museo de Arte Contemporáneo de Rijeka y luego en Zagabria en el Instituto de Cultura Italiana. En 1997, Carla Tolomeo exhibió por primera vez sus Sedie, las sillas esculpidas que marcan un punto de inflexión en su producción artística, asombrando a coleccionistas de todo el mundo con su diversión artística.

Como ella misma escribió en la presentación de su primer catálogo dedicado a las Sillas Esculturas, su filosofía es la mutación / transformación de cualquier objeto en un objeto artístico, comenzando por el elemento más simple del hogar: una silla. Fuerte por las vivencias, los estudios y el recuerdo de su antiguo maestro, Giorgio de Chirico, Carla Tolomeo es capaz de transformar la silla en algo mágico: un tótem, un tirón de peces, una flor gigantesca. Sus Sillas-Esculturas se convierten en algo mágico que trae recuerdos de la infancia, manteniendo el toque de picardía de quien ha vivido intensamente su vida.