Hugues Gillet se propuso, a través de su pintura, dar una forma material, objetivada, exteriorizada a su universo personal. Figuraciones mitad planta, mitad animal pueblan paisajes exuberantes o horizontes lisos en los colores de la tierra quemada, como tantas pesadillas reveladas en Luego combina formas humanas, rostros impasible, hieráticos, con otros reinos vegetales y minerales, para dar forma a nuevas visiones terribles, para volver a visitar antiguas leyendas y mitos o para presenciar el mundo contemporáneo. Estas hibridaciones, por inquietantes que parezcan nos son familiares, fruto de una larga tradición artística de representación de lo surrealista y lo sobrenatural, y entretejen, sobre las pinturas, las etapas de la búsqueda metafísica del artista y su particular poesía Bajo un estilo clásico y figurativo, Hugues Gillet , artista perfeccionista, ofrece para quien quiera ver bien, uno de estos "mundos posibles" de los que tener a Paul Klee .... "