Mario Comensoli

Artista suizo de origen italiano, es considerado como un gran exponente del realismo pictórico. Vivió una infancia dura en los suburbios de Lugano, liberándose a través del arte: era un niño talentoso y autodidacta, por lo que ganó una beca gracias a la cual cursó la Kunstgewerbeschule y la ETH de Zúrich. Finalizada la carrera académica, antes de trasladarse a Zúrich, realizó varios viajes a París donde conoció a muchos grandes artistas, fascinados por la poética del cubismo. En la metrópoli helvética, desarrolló su recorrido artístico personal que tenía sus raíces en la realidad social. Sus temas favoritos fueron los inmigrantes del sur de Italia, los forasteros y la juventud de los setenta y ochenta: gente fuera de la caja, observada con curiosidad y empatía por el pintor. Unos años antes de su muerte, Comensoli recibió un homenaje a su arte con una importante exposición en la Kunsthaus de Zúrich. Tras su muerte, ciudades como Lugano, Milán, Bolonia, Losanna y Locarno organizaron prestigiosas retrospectivas.