RS Artist

Autodidacta, RS Artist es un joven artista francés nacido en Niza a principios de los años 90. Abogado de formación, pinta y dibuja desde muy joven y por ello sigue explorando múltiples campos artísticos.

Inspirado en la obra de Basquiat, el Pop Art de Warhol, los collages de Villeglé o la furia de Pollock, el artista nos adentra en su mundo, entre Pop Art, Street Art y Urban Art.

RS Artist es parte de esta nueva generación de artistas que combina tanto el arte pop como el arte callejero, entregándonos así obras a todo color, una inteligente mezcla de rendimiento, fuerza y vida. Un arte alegre, impulsivo, donde en el corazón de sus obras un caos nos conduce inexorablemente hacia un futuro lleno de promesas. Qué quiere decirnos el artista, si no que tenemos que disfrutar, vivir, probar ...

Siguiendo la tradición de sus antecesores, RS Artist utiliza técnicas mixtas y actuales, como el collage de carteles rasgados, pintura acrílica o incluso aerosoles y stencils. Así, carteles rasgados o fotos rasgadas se combinan armoniosamente con capas de acrílico y esténciles hechos con pintura en aerosol.

De un vistazo, lo que se nota frente a las obras de este artista es la cantidad de elementos que las componen. Ningún detalle se deja al azar, no se descuida ningún espacio.

RS Artist generalmente se esfuerza por sacar las imágenes de su contexto inicial para construir una nueva composición que permita al espectador adentrarse en esta pintura y forjar su propia historia en términos de su sensibilidad y su imaginación.

Cada símbolo cuenta, las imágenes y los personajes son cuidadosamente seleccionados, de periódicos, carteles o fotografías, para permitir la creación del significado más relevante para el autor pero también para el espectador. Desvía así la imagen que podemos tener de estos personajes. En algunos de sus trabajos incorpora marcas para recordar la dependencia que tenemos los humanos de los productos de consumo. Así, no se trata de transformar la estética de la vida cotidiana en una obra de arte sino de demostrar que arte, sociedad de consumo y cultura pop están al mismo nivel y pueden convivir en una sola imagen.