Claude Bertrand (peintre)

Como mosaicos de colores vivos y brillantes, las obras de Claude Bertrand se nutren de un estilo pictórico lleno de ímpetu, un estilo personal y reconocible a primera vista, que ya es suyo desde hace varios años.

De este furioso colorido puro y vigoroso, pero a menudo sin contornos, surge un estilo pictórico atmosférico en el suave brillo del conjunto. La emersión y el desvanecimiento, el desenfoque y los pasajes sutiles dominan la pintura a través de manchas de acrílico o de un material que capta los aspectos enterrados del mundo que explora. A través de estas sutilezas, que el artista domina con exacerbada sensualidad y sensibilidad, el espectador se enfrenta a un momento de convivencia en torno a paisajes casi cúbicos, de momentos evanescentes de la vida. Estas fragmentaciones de la composición, en parcelas de color, forman parte, para el artista afincado en el sur de Francia, de un trabajo que permite una renovación constante. Una necesidad.