Dagobert Peche

"Dagobert Peche fue el mayor genio ornamental que apareció en Austria desde el Barroco". Josef Hoffmann una vez rindió homenaje a Dagobert Peche.

Como un clásico del diseño del Wiener Werkstatte, este espejo da testimonio del talento de Peche. Es una simbiosis de sencillez y opulencia. El espejo cuadrado es simple en su forma, mientras que su marco es opulento. Peche decora profusamente el espejo con motivos vegetales en forma de estilizadas hojas de palmera. Talladas en madera de tilo y aún con el dorado original, las hojas envuelven armónicamente el espejo original de vidrio emplomado.

El follaje fue un motivo central del modernismo vienés y muchos artistas capturaron el rico lenguaje ornamental de la naturaleza en sus diseños. Con este espejo, Peche logró plasmar magistralmente la naturaleza en forma artística. Así, convirtiéndolo en uno de sus diseños de espejos más importantes y atemporales.

Diseñado en 1922 para Wiener Werkstatte, el espejo fue producido por el renombrado fabricante de marcos Max Welz en Viena, que en ese momento tenía un contrato exclusivo con Wiener Werkstatte. Los extravagantes espejos de Peche se vendían en las tiendas de Wiener Werkstatte. Ya sea en la sede de Viena o en sus sucursales en Zúrich, Berlín o Nueva York, llegaron a una clientela internacional.