Olga Antich

Me formé en un ambiente artístico entre la música y la pintura. Empecé a estudiar cerámica con Angelina Alós (periodo 1977-1981). Continué con la escultura con el profesor Enric Cots (periodo 1981-1986), trabajando en el taller de escultura de la artista Rosa Martínez Brau.

Durante estos últimos quince años he colaborado con la Galería de Arte llamada NOU-CENTS, y donde tengo obra en exposición permanente.

Mis primeras exposiciones datan de 1994, Sabadell, Barcelona, Esplugas de Llobregat, Sant Llorenç de Morunys (Lleida), etc. Reconozco que me siento más identificada con el barro que con cualquier otro material, por muy noble que sea; es con el barro como mejor expreso mis sentimientos: ternura, amor, serenidad, sencillez, y a la vez vitalidad y realismo, aunque no siempre estoy satisfecha con el resultado.

He colaborado en muchas exposiciones colectivas, entre ellas las organizadas por la Asociación de Escultores de Cataluña.

El mundo del Arte es tan apasionante para todas las personas que lo aman, que te ves inmerso en él, imbuido dentro de un gran huracán que se lo lleva todo y te transporta a través del tiempo.

En mi opinión, la escultura es terracota, es su esencia, su misterio, su vida. Después, el final puede ser diferente, no importa si pongo el alma de mis preocupaciones en el material de mis ejercicios formales. Mi obra podría definirse como mediterránea, sensual, con connotaciones del siglo XIX, pero siempre sin adornos, humana, directa al espectador. Aunque para mí es difícil seleccionar entre mis obras, "Reflexió" y "Serenor" son dos ejemplos en los que se refleja tanto mi gusto por las formas femeninas como todas las características mencionadas.