Marianne Quinzin

Centrada en la abstracción, la obra de Marianne Quinzin evoca la naturaleza y sus elementos. Flores, paisajes, cielos, aguas, montañas y rocas nutren su inspiración.

Impulsado por el color y la experimentación, cada lienzo lo invita a una nueva aventura. El artista crea espacios imaginarios imbuidos de recuerdos y emociones, en un diálogo entre voluntad y azar, intención y accidente, prejuicio y uso de lo inesperado.

Sus afinidades artísticas son múltiples y eclécticas. Admira la luz de Turner, el poder de las vibraciones coloreadas y el rigor de las composiciones de De Staël, la explosiva libertad de Joan Mitchell, la maestría técnica y la amplitud de la obra de Gerhard Richter, a veces figurativa, a veces abstracta.

Los movimientos artísticos que influyen en su pintura son principalmente el expresionismo abstracto y la abstracción lírica. Se inspira particularmente en la obra de Zao Wou-Ki, por su búsqueda de la luz, su juego de transparencias y opacidades, y sus alternancias de vacío y plenitud.

Pintora profesional inscrita en el I.CAC, licenciada en Artes Decorativas y en la Escuela Nacional de Bellas Artes de Lyon, se dedica íntegramente a la pintura desde hace unos veinte años. Hoy vive y trabaja en Rouen. Su obra está presente en numerosas colecciones privadas en Francia y en todo el mundo.