Jean-Joseph Sanfourche

Jean-Joseph Sanfourche (1929 - 2010) nació en Francia, en Burdeos. El joven fue introducido al dibujo por su padre, un mecánico y pintor-dibujante. Unos años más tarde, durante la Segunda Guerra Mundial, la familia fue arrestada por la Gestapo. El padre recibe un disparo; en cuanto a Jean-Joseph y su madre, afortunadamente son liberados y enviados a Limoges. Puesto bajo tutela, el adolescente luego estudia contabilidad. Cuando alcanza la mayoría de edad, se independiza y se instala en París. Se convirtió en director técnico de una fábrica textil, antes de ser designado, a la edad de veinticinco años, para dirigir una fábrica de prêt-à-porter. Terminó abandonando el sector industrial y trabajó durante algún tiempo en la administración, especialmente en el Ministerio de Relaciones Exteriores, luego volvió a vivir en la región de Limoges donde vivió hasta su muerte. Jean-Joseph Sanfourche se dedica a la creación artística desde los seis años. Artista polifacético, dibuja, pinta, escribe, esculpe piedra y madera, trabaja con esmalte y bronce. Desde finales de los años sesenta también ha utilizado materiales poco habituales, como el pedernal o los huesos humanos, que talla y sobre los que pinta pequeñas figuras de colores. Sus creaciones recuerdan el mundo de Gaston Chaissac, a quien conoció en 1956 en Vix y con quien colaboró. Jean-Joseph Sanfourche también mantuvo durante dieciocho años una importante correspondencia ilustrada con Jean Dubuffet.