Mathieu Josset

Siempre apasionado por las culturas afrocaribeñas, Mathieu pisó África por primera vez en 2009, en Bamako.

Allí descubre un otro lugar hecho de compartir, hermandad, discusiones apasionadas y paisajes grandiosos del que se enamora y que lo empujarán a volver a explorar toda la riqueza de África.

Desde las costas del Níger hasta los frondosos bosques de Camerún, pasando por las bulliciosas capitales del Golfo de Guinea, todo es fuente de inspiración en una África de culturas fascinantes, impregnadas de tradiciones, creencias y leyendas.

La tela es para él el símbolo de esta vida colorida, cantando y bailando. Sus motivos tradicionales encarnan la esencia misma de las identidades africanas.

Quiere contar historias tanto ancestrales como contemporáneas, las de una África que crece, se transforma y se difunde por el mundo, rica en costumbres y en su juventud innovadora.

El trabajo de Mathieu Josset, porque es un trabajo en el sentido de un proceso artesanal de diseño y fabricación, de un compromiso con la calidad, reflejo de un saber hacer efectivo, es un homenaje humilde y nostálgico. Un homenaje al trabajo de los tejedores.

Aquellos que comparten tiempo, vida, cultura y patrimonio en su artefacto. Mathieu, lejos de apropiarse de su obra, intenta rendirle homenaje y esbozar el tiempo, laborioso, de unos pliegues la posibilidad de un reencuentro que imaginaba en su corazón y los recuerdos de sus viajes.

Las obras de Mathieu Josset son gestos y sensaciones, marcos y perspectivas, memoria y posibilidad.

El gesto de plegado exige volumen, material y texturas. A través de esta relación con la intención del artista y su ejecución, surgen sensaciones.

Del que busca, olfatea, prueba, toca, olfatea y finalmente se decide por la tela. Y quien luego lo convierte en una obra con vistas a una obra. Quienes miran, dan un paso atrás, se acercan, se ponen en perspectiva y se abandonan a patrones repetitivos para reimaginar la sensación de las piezas fijadas en el lienzo.

Cada parte del trabajo, cada plegado es un trabajo en sí mismo. De esta forma, el artista cuestiona la noción de trabajo en el oficio de la obra.

¿Son los artistas los que inicialmente tejieron? ¿El que humildemente toma prestado el tejido para reencarnarlo en un proceso artístico o el que lo observa con voraz curiosidad? Codicioso de colores y texturas.

El deseo de tocar cumplido por la alegría de ver y adivinar el movimiento subyacente de la estructura de la obra. Mathieu Josset los anima a trabajar para ver y reflejar las tradiciones.